Trashy Bag es una bolsa de la compra maravillosamente práctica. Es plegable y, gracias a la cremallera integrada, puede guardarse de forma ordenada y ahorrando espacio. La bolsa mide 35 x 47 x 20 cm (ancho x alto x fondo), puede transportar hasta 18 kg y es casi indestructible. Pero, ¿qué hace que esta bolsa de la compra sea tan popular que incluso hay problemas ocasionales de entrega debido a la gran demanda?
La respuesta la encontrará si observa la bolsa más de cerca. El inusual diseño se debe a que las Trashy Bags se fabrican a partir de un mosaico de bolsas de agua potable recicladas. Estas bolsas de agua potable son el único acceso a agua potable limpia y relativamente barata para millones de personas en África. El problema es que las bolsas vacías se tiran en masa, estropeando el paisaje, obstruyendo las alcantarillas y suponiendo un peligro para los animales. Sólo en Ghana, donde tiene su sede Trashy Bags, se producen 250 toneladas diarias de residuos plásticos.
Trashy Bags es un ejemplo de cómo la necesidad puede convertirse en virtud.
Convertir la basura en tesoros: Esa es la idea de Trashy Bags
En sentido estricto, Trashy Bags ofrece tres ventajas: En primer lugar, los residuos se reciclan de forma significativa. Puede que sólo sea una gota de agua en el océano, dadas las enormes cantidades que se generan, pero sirve de ejemplo. En segundo lugar, y lo que es más importante, unos 60 empleados pueden mantener a sus familias trabajando en Trashy Bags. Esto se debe a que Trashy Bags paga buenos salarios, ofrece buenas condiciones de trabajo y está comprometida con el comercio justo. El tercer punto es un mensaje que todos los que compran y usan Trashy Bags pueden transmitir: Estas bolsas sólo existen porque el abastecimiento de agua es un gran problema en África. Un impulso que invita a la reflexión para hacer algo por cambiarlo.